Justin Bieber, rápido y furioso

Zine fue quien alertó a las fuerzas del orden, que terminaron por multar al artista la pasada semana por superar el límite de velocidad en autopista, fijado en torno a los 100 kilómetros por hora (65 millas por hora).
Rápido y furioso se desplazaba Bieber el viernes pasado por una de las principales autopistas de Los Ángeles, perseguido inclementemente por una jauría de paparazzis dispuestos a todo con tal de servirse de su nombre. Particularmente uno de ellos, de apellido latino según ha trascendido, le montó una persecución de vértigo, zigzagueando como un endemoniado entre los carriles, evitando vehículos como quien se salta boñigas. Como en los mejores filmes de acción de Hollywood, en la tradición americana de la velocidad sin atenuantes.
Tras ser detenido por la policía, Justin Bieber se desplazó a la comisaría para presentar denuncia contra el fotógrafo “que más cerca le ha puesto de la muerte”, y que según sus alegaciones se mostró especialmente agresivo durante la persecución.